Kremlim

Edificio histórico en Moscú

Descripción y características. Kremlim

A diferencia de lo que podamos pensar, el Kremlin de Moscú no es un edificio, sino un conjunto de ellos, tanto civiles como religiosos, ubicado en el centro de la ciudad, muy cerca del río Moscova.

Al este, encontramos la Plaza Roja; al oeste, el Jardín de Alexander.

El Kremlin agrupa cuatro palacios y cuatro catedrales. Éstos se encuentran en un recinto delimitado por la denominada Muralla del Kremlin, incluyendo las torres del Kremlin.

Así, éste cuenta con 2.25 Km de muralla almenada; 19 grandes torres, rodeadas por un foso y por el río Neglínnaya. Podemos observar la Catedral de la Asunción, obra de Aristóteles Fioravante, siendo el principal templo del estado ruso. La Iglesia de la disposición del manto de la Virgen; la Catedral de la Anunciación, la Catedral del Arcángel San Miguel, y el cementerio de los zares y príncipes de Moscú.

Citaremos algunos de los edificios más significativos, como pueda ser el de la Catedral de la Asunción. Se trata de uno de los más antiguos del Kremlin, pues su construcción se llevó a cabo entre los años 1475 y 1479.

Sus muros son de piedra blanca labrada, con bóvedas y cúpulas de ladrillo. Otras cinco cúpulas doradas coronan el templo. Son destacables las pinturas con las que se adoran el altar, realizadas al fresco y al temple.

La parte central del templo se separa del altar por un iconostasio de cinco series superpuestas, el cual alcanza 16 metros de altura.

Estamos ante el principal templo ruso de la época antigua, signo de su poder y grandeza. En él tenían lugar las ceremonias solemnes y se proclamaban las disposiciones del Estado. Así mismo, era el lugar para la toma de posesión del trono de los zares rusos y del coronamiento de los emperadores.

La Catedral del Arcángel fue construida entre los años 1505 y 1508. Cuenta con magníficos frescos, obra de renombrados autores rusos. En el edificio podremos observar, por otra parte, la gran influencia del Renacimiento Italiano.

El edificio, hasta el siglo XIX, cumplió la función de panteón de los zares de Rusia. En él descansan 54 cuerpos en las tumbas de la Catedral y existen 46 lápidas de piedra.

El Campanario de Iván el Grande se sitúa en el centro del Kremlin, siendo una de las obras arquitectónicas más admiradas del siglo XVI. Esta ubicación le da el carácter de eje central de toda la composición, siendo el elemento unificador de todos los edificios del Kremlin, sean cuales fueren sus épocas y estilos.

Lo más característico del edificio es su imponente y esbelta torre con campanario, la cual dio orientación a numerosos templos de la arquitectura de la vieja Rusia. La torre consta de tres cuerpos con figura de columna. Estos cuerpos son ochavados superpuestos, en orden descendente. Cada uno de ellos cuenta con una terraza y una galería descubierta en la que se sitúan las campanas.

El primer cuerpo cuenta con una escalera de piedra de 83 peldaños; el segundo es helicoidal y cuenta con 149 peldaños; el último está provisto de una escalera metálica de 97 peldaños por la que se accede a la cúpula dorada, la cual corona la torre.

Las campanas son una muestra de las magníficas obras de fundición rusa de los siglos XVI a XIX. En total, existen 21 campanas.

Dejando los edificios religiosos, pasamos a ver el Palacio del Senado, edificio neoclásico, construido a finales del siglo XVII, bajo el reinado de Catalina la Grade. Desde 1991 es la residencia oficial del presidente de la Federación.

Su fachada norte da a la Plaza Roja, de la que se separa por la muralla del Kremlin. Desde este lugar, se accede al Palacio por las puertas de la Torre de San Nicolás o la Torre del Senado, muy cercana al Mausoleo de Lenin.

Se construyó durante los años 1776 y 1788, con la finalidad de albergar el Senado moscovita, como máxima institución legislativa de la Rusia Imperial. En la Revolución rusa, el edificio fue destruido por los bolcheviques, siendo reconstruido por Lenin hacia el año 1918.

Su planta es triangular, aprovechando al máximo el espacio disponible. Consta de tres edificios, comunicados entre sí y separados por patios. En el edificio principal se encuentra el salón de Catalina o la Sala Blanca, en la que se ubica una gran cúpula de 25 metros de diámetro por 27 de altura.

El edificio del Arsenal se caracteriza por su sobriedad y escasa


La mejor fecha para visitar este lugar:
No debemos olvidar que, para viajar a Rusia, necesitaremos, además del pasaporte en regla, un visado turístico; es posible gestionarlo en la Embajada rusa en Madrid (915622264). Si nuestro viaje lo realizamos a través de una agencia, ellos mismos se encargarán de todo. La mejor época para realizar nuestra visita es en verano, pues las temperaturas son más cálidas. Debemos tener en cuenta que, tras agosto, el descenso de las temperaturas es rápido y los meses de invierno se anticipan. No obstante, si vamos en invierno, tendremos que equiparnos con ropa y calzado de abrigo, resistentes a temperaturas bajo cero. La entrada al Kremlin se realiza por los jardines Aleksandrovsky, a través de la Torre de la Trinidad, donde hallaremos las taquillas. Recomendamos llegar lo más pronto posible, pues el lugar se llena de turistas enseguida, y de esta forma evitamos colas en las taquillas y nos aseguramos una visita más tranquila.

Tipo de lugar: Edificio histórico

Ubicación: Ciudad

Apropiado para niños
Apropiado para personas mayores
Apropiado para personas discapacitadas
Apropiado para visitar en familia
Restaurantes cercanos
Hoteles cercanos

Año de construcción: 1156

Autor: Varios autores

Precio de la visita:
Existen dos tipos de entradas: una para circular por todo el recinto amurallado y otra para las visitas a las iglesias. También podemos pagar en cada una de las iglesias que deseemos visitar.
La entrada a la Armería se abona aparte de las anteriores.
El precio es de 15.€ para adultos; los niños pagan 6.-€



Horario:
Abierto a diario, excepto jueves. Desde las 10.00 a las 17.00 horas.
Las visitas a la Armería se realizan por turnos, los cuales se especifican en la entrada. Estas entradas sólo se pueden sacar entre las 10.00 y las 14.30 horas

Historia:

El emplazamiento ya era ocupado en los siglos XI y XII por una pequeña ciudad de la localidad Kuchka.

Kremlin venía a significar parte amurallada dentro de una ciudad.

En el año 1156, tratándose ya de Moscú, se excavó un foso y erigió una muralla, para construir a finales del siglo XII un fuerte. En esta época, la ciudad ocupaba una tercera parte del área actual del Kremlin.

La ciudad llega a capital del principado en el siglo XIV, construyéndose en el Kremlin una fortaleza de piedra blanca, la cual será objeto de numerosas reconstrucciones: entre 1339 y 1340, se cavó un nuevo foso y se elevó alrededor de la fortaleza una importante muralla que llegó a alcanzar 1600 metros de perímetro.

En dicha época, el Kremlin pasa a convertirse en la residencia oficial del Príncipe y de su familia en Moscú. Igualmente, fue el momento en el que se da construcción a las catedrales: la de la Asunción, la Iglesia de Nuestro Salvador, la Catedral de San Miguel y la torre del campanario de San Iván.

Bajo la monarquía de Dimitri Donskoy se levantó la gran fortaleza de piedra blanca con sus nueve torres, terminándose en tan solo dos años. De esta forma, a finales del siglo XV el Kremlin era el núcleo de la cultura rusa.

Los doscientos años siguientes, de luchas, culminaron con la unificación del estado más grande de Europa. Será en los siglos XV y XVII en los que se proceda a la construcción de los monumentos arquitectónicos que hoy podemos observar en el recinto.

Durante el siglo XVII los viejos edificios del lugar son reconstruidos y creados otros nuevos: así, entre 1635 y 1656 se construyen las Cámaras del Patriarca y la pequeña Catedral de los Doce Apóstoles.

En el año 1713, Moscú cede la capitalidad a San Petesburgo, convirtiéndose el Kremlin en residencia temporal de la corte de los zares. Entre 1776 y 1788 se construye el Senado, y, entre 1838 y 1850, el Gran Palacio del Kremlin.

Tras la Gran Revolución de octubre de 1917, Moscú recuperó la capitalidad. El Gobierno trasladó su sede a la ciudad y ocupó el Kremlin, cerrándolo a los visitantes.

Las modificaciones y reconstrucciones se siguieron a lo largo del siglo XX: los viejos monasterios fueron sustituidos entre 1932 y 1934 por edificios del gobierno; entre 1946 y 1958, se restauran catedrales y palacios; en 1961 se construye el Palacio de Congresos.

La apertura al público hubo de esperar al año 1955. En 1990 se incluye en la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco.

Al año siguiente se procede a la fundación del Museo Estatal de la Historia y Cultura del Kremlin; éste incluye: la Armería, la Catedral de la Asunción, la Catedral del Arcángel Miguel, la Catedral de Anunciación; Museo de Artes Aplicadas y Uso Corriente de Rusia del siglo XVII, conjunto del Campanario de Iván el Grande, así como otros monumentos arquitectónicos.

Además, incluye tres edificios cuya finalidad es la de residencia oficial del presidente de la Federación Rusa: el Palacio del Senado, el Gran Palacio del Kremlin y la Escuela Militar.